Que unas zapatillas registren las estadísticas de cuánto corres en una semana o que un cepillo de dientes alertara de cualquier caries y pidiera por ti una cita al dentista, son posibles aplicaciones de lo que se conoce como "El Internet de las cosas".
La idea que quiere representar queda bien ilustrada por su nombre, cosas cotidianas que se conectan a Internet.
Se trata de una revolución en las relaciones entre objetos y las personas, incluso entre los objetos directamente, que se conectaran entre ellos. Se acerca la digitalización del mundo, y bastará con integrar un chip en cualquier objeto del hogar, del trabajo o de la ciudad para poder transmitir información a partir de él.
Se dice que en 2020, hasta 50.000 millones de dispositivos se conectarán a Internet para proporcionar a los ciudadanos una serie de servicios y aplicaciones inteligentes.
No hay comentarios:
Publicar un comentario